Baleares sigue liderando el mercado náutico nacional durante la pandemia de la COVID-19 a pesar de ser una de las comunidades más afectadas por la crisis sanitaria debido al impacto económico del desplome del turismo, según el análisis de la Asociación de Empresas Náuticas de Baleares (Aenib).

En dicho estudio, basado en el informe anual presentado y elaborado por la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN), Aenib concluye que a lo largo de 2020, se matricularon en Baleares un total de 1.020 embarcaciones de recreo, incluidas motos de agua.

Esta cifra implica un descenso del 10,99% con respecto a 2019, cuando fueron 1.146 las embarcaciones matriculadas en las Capitanías marítimas de Baleares. En la media nacional también se registró un descenso total del 11,1% en las compraventas de embarcaciones, hasta situarse en 5.404 unidades.

De esta forma, el 18,87% de las embarcaciones matriculadas en España en el año que acaba de finalizar lo hicieron en Baleares, que conserva el primer puesto por provincias en el mercado náutico nacional. Le siguen a mucha distancia Barcelona (9,44%), Alicante (6,24%), Madrid (6,14%) y Málaga (6,05%).

En cuanto al mercado de alquiler, registró un descenso interanual del 20,84% en Baleares, con 300 embarcaciones matriculadas frente a las 379 de un año atrás. Esto supone que las Islas aglutinan una cuarta parte (25,55%) de este mercado, que en el conjunto de España ha caído un 24,8% hasta situarse en 1.174 unidades.

Ante estos datos, el presidente de la Aenib, Jaume Vaquer, ha asegurado que la sociedad balear ha demostrado “su madurez” en el ámbito náutico, ya que ha cubierto “gran parte del hueco que ha dejado el cliente extranjero, tanto en la adquisición como en el alquiler de embarcaciones”.