Se dice que una final es cuando ya no hay nada más a continuación y suceda lo que suceda el próximo sábado tras el Mallorca – Granada nada será definitivo ya que todavía quedarán tres jornadas para acabar el campeonato, pero no cabe duda que son tres puntos de vital importancia y caso de ganar al Mallorca se le abrirán de par en par las puertas de la ansiada permanencia.
Creo que desde el primer momento Javier Aguirre ha tenido claro que la salvación pasa por Son Moix dado el mal rendimiento del equipo lejos de casa, ni un solo punto en toda la segunda vuelta, y aunque no se quiera reconocer se jugó el partido contra el Barcelona con la mente en el del Granada, particularmente no me parece mal.
Históricamente al Mallorca no se le ha dado nada bien jugar contra el Granada como local y en Primera División. De hecho solamente se le ha ganado una vez y fue en un lejano 05/03/1961 (1-0), por en medio un legendario 4-6 en el Luis Sitjar en la temporada 1969/70. Pero que nadie se alarme, únicamente se han enfrentado en cinco ocasiones en la máxima categoría y no deja de ser una curiosidad.
Cabe recordar las dos últimas visitas del Granada en Son Moix que no han sido precisamente de trámite, en 2019 tras empatar a un gol, el conjunto granadino lograba de manera matemática el ascenso a Primera División y el Mallorca aseguraba su presencia en el play off. En 2020 el Granada se imponía 1-2 y enviaba al Mallorca a Segunda División. El fútbol siempre te da la oportunidad de revancha, quizás ha llegado el momento de devolverles el “favor”.
El horario no es bueno ni para público ni jugadores, a las dos en el mes de mayo no se deberían jugar partidos pero a LaLiga poco le importa. No obstante, todo indica que Son Moix se llenará, la afición será parte importante del encuentro y su aliento se debe notar desde el primer minuto y, que nadie lo dude, solo interesa la victoria.
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