El mal primer tercio de la campaña del Real Mallorca podría llevar a más de un despistado a pensar que el equipo de Aguirre debería ocupar las posiciones de descenso. Y es que el bagaje de una sola victoria en 13 jornadas y tan solo 9 puntos es realmente pobre.

Es innegable que el equipo está en una muy mala dinámica y que, si la cosa no cambia, el conjunto mallorquín va a sufrir mucho por aguantar la categoría este año. Pero más allá de las sensaciones, están los datos, y es que este año la permanencia se prevé muy barata.

Es realmente extraño que un equipo con el inicio de liga que ha tenido el Mallorca no esté en posiciones de descenso, pero así es la realidad. De hecho, no solo es así, sino que el Mallorca tiene un partido jugado menos que sus perseguidores, que jugará este miércoles contra el Cádiz, que se sitúa un punto por encima.

Así, con 14 partidos jugados y en descenso, se encuentran el Celta con 8 puntos, el Granada con 7 y el Almería con tan solo tres. Tres equipos en muy mala dinámica que permiten a un Mallorca que deja mucho que desear en cuanto a números no tocar las posiciones de descenso.

Semana clave

El equipo había generado muchas expectativas con la confección del equipo en verano, pero los resultados hasta diciembre no han acompañado en lo absoluto. Todo el mundo está de acuerdo en que el equipo tiene mimbres más que suficientes para mantener la categoría sin sufrimiento.

Para revertir la situación, el club entra en una semana clave de la temporada, y es que este miércoles juega ante el Cádiz el partido aplazado y este domingo ante el Alavés. Dos rivales directos y dos partidos seguidos en Son Moix, a los que se les sumará un tercero de Liga ante el Sevilla la semana que viene.

De los resultados de estos dos partidos dependerá la situación y la tranquilidad del equipo para afrontar lo que resta de temporada. Asimismo, también es una semana clave para Aguirre si no quiere ver peligrar su continuidad al frente del Mallorca.