El pleno ordinario del Ayuntamiento de Llucmajor ha aprobado una moción impulsada por el grupo municipal de VOX en la que se insta al Govern Balear a solicitar al Gobierno central la suspensión inmediata de la implantación de la asignatura de religión islámica en los centros educativos públicos de las Islas Baleares.
La propuesta, respaldada por los votos del equipo de gobierno formado por PP y VOX, ha generado un intenso debate en el consistorio. La moción defiende que el sistema educativo español debe apoyarse en los valores de la civilización occidental y cristiana, y considera que la inclusión de la religión islámica en las aulas no favorece la integración.
La portavoz de VOX y segunda teniente de alcalde, Margarita Palmer, ha declarado que esta medida responde a las inquietudes de muchas familias del municipio. También ha criticado la posición de los grupos de la oposición, como PSOE y Més per Mallorca, que votaron en contra, así como la abstención de S’Ull y Llibertat Llucmajor.
Compromisos municipales añadidos
Además de instar al Govern Balear, la moción compromete al Ayuntamiento a que ningún centro público de Llucmajor imparta la asignatura de religión islámica. También incluye el propósito de promover los valores de la unidad nacional y de la civilización occidental, así como fomentar el patriotismo entre la ciudadanía.
Palmer ha afirmado que esta decisión representa un paso decisivo para la defensa de la identidad cultural y social del municipio. Según ha indicado, el objetivo es que las futuras generaciones crezcan en un entorno que respete las raíces y fomente una integración basada en valores compartidos.
La aprobación de esta moción se produce en un contexto de debate en las Islas Baleares sobre la inclusión de distintas religiones en el currículo escolar, con posturas divergentes entre los distintos grupos políticos sobre los principios de integración, neutralidad religiosa y libertad educativa.
0 comentarios