El Grupo Parlamentario Socialista ha registrado una iniciativa en el Parlamento de las Islas Baleares para acercar a los niños a los entornos naturales a través de la actividad educativa, trasladando parte de la práctica escolar -tanto formal como no formal- los entornos naturales, pero siempre como una práctica complementaria a la metodología habitual en el aula y sin que ello suponga una carga adicional a los equipos docentes.

“La degradación de los espacios naturales es, por desgracia, una realidad”, expone el diputado socialista Juan Ferrer, impulsor de esta iniciativa que busca implicar a los más jóvenes en el cuidado del entorno natural “dentro del mismo entorno natural”.

“Los niños son el futuro y su también será la responsabilidad de cuidar nuestro planeta”, asevera el diputado, quien pone de ejemplo medidas que ya han llevado a cabo países como el Reino Unido o Dinamarca en este sentido, para relacionar los estudiantes con los entornos naturales y conseguir “una mayor conexión con la naturaleza y un aprendizaje no sólo de la naturaleza, sino también en la naturaleza, y de todo aquello que nos puede ofrecer”.

PNL

Específicamente, la proposición no de ley, insta al Gobierno de las Islas Baleares a impulsar, desde la educación forma y no formal, prácticas educativas en los entornos naturales. También se pide al Ejecutivo central que colabore con los ayuntamientos de las Islas para hacer más accesibles estos entornos naturales y acercarlos a los niños “para que puedan hacer de la naturaleza una experiencia también educativa”.

En este sentido, el socialista recuerda que hace pocos meses, el Gobierno de las Islas Baleares aprobó la declaración de emergencia climática en la Comunidad Autónoma y que esta iniciativa se enmarca en la hoja de ruta pactada en los Acuerdos de Bellver para fomentar la sostenibilidad ambiental y social en el archipiélago.

Ferrer también explica que uno de los pedagogos de referencia en Italia, Francesco Tonucci, ya hace tiempo que pone de relieve la importancia que tiene que los niños tomen contacto con su realidad más directa, en su ciudad pero también en sus entorno naturales.

Foto: PSIB