La economía de Baleares ha crecido un 2,9% en el segundo trimestre de 2024, en relación con el mismo periodo del año anterior, con aumentos del 3,3% en el sector servicios, 2,6 en el sector primario, 1,2% en la construcción pero una bajada del 3,5% en industria.

Estas son algunas de las cifras presentadas este miércoles en rueda de prensa por el vicepresidente y portavoz del Govern, Antoni Costa, y la directora general de Economía y Estadística, Catalina Barceló.

De este modo, Baleares mantiene una senda de crecimiento respecto del mismo periodo del año pasado, con una cifra igual que la media española y muy por encima de la europea, que es de +0,8%.

El crecimiento por islas ha sido bastante similar en este segundo trimestre, con un 3% en Mallorca, un 2,8% en Menorca y un 2,3% en las Pitiusas.

Barceló ha explicado que este dinamismo se refleja en un aumento del empleo en todos los sectores, que permite alcanzar cifras “sin precedentes”, ya que el mercado laboral se mantiene “robusto” y “en máximos”, con 636.870 afiliados.

Después de un mes de agosto con una afiliación histórica en el sector servicios –542.808 afiliados tras una subida interanual del 3,8 %– y en la construcción –59.025 afiliados con un crecimiento del 1,7 % respecto del año pasado–. También hay subidas en la industria en un 2,5% y en el sector primario en un 0,8%.

Las cifras generales del sector servicios son “dinámicas”, con una facturación que se incrementa un 6,5% y triplica la de España. Sin embargo, caen las ventas del comercio al detalle, con una bajada del 0,6% hasta julio, mientras que la media española mejora un 1,4%.

El gasto turístico acumulado hasta julio ha aumentado hasta los 12.406 millones de euros, con un incremento del 13,6% respecto a 2023 y un gasto medio por persona y día de 191 euros, el más alto de los últimos nueve años. De hecho, la variación de este dato desde 2016 ha experimentado un crecimiento del 44,6%.

Crecen también el número de turistas –un 5,8%– y las pernoctaciones totales –un 6,1%–, dado que hasta julio llegaron 10,7 millones de visitantes, con un incremento del 7% entre los turistas extranjeros, y la estancia media se sitúa en 6,1 días.

Del mismo modo, crece el transporte de pasajeros un 6,6% hasta junio, básicamente por la subida de la vía aérea –+7,4%–, aunque también hay mejoría en la llegada por mar –+2,5%–.

En cuanto a la construcción, caen los proyectos de viviendas visados en el primer semestre –un 1,4% menos– hasta alcanzar niveles similares a 2019, con un total de 1.519 viviendas.

La bajada en la compraventa es mayor puesto que se reduce un 14,5%, motivada por la caída del 12,4% en la variación anual de transacciones de viviendas de segunda mano. Por otro lado, el precio de la vivienda libre continúa al alza con un crecimiento del 6% en el primer semestre.

Por su parte, la industria se debilita con una caída de la producción del 7,1% hasta julio, mientras que la media nacional en el mismo periodo experimentó un crecimiento del 0,9%.

Asimismo, la demanda eléctrica cayó un 1,3% respecto del año pasado, aunque el peso de la generación renovable aumentó desde un 4,4% del total de la energía consumida en 2019 al 11,8% en 2024, algo que puede también puede haber motivado esta bajada de la demanda eléctrica.

Además, en el primer semestre del año se registró un superávit de 450 millones de euros en el comercio exterior, lo que supone un crecimiento del 4,6% de las exportaciones –que alcanzan cifras récord– y una caída del 1,9% de las importaciones.

Finalmente, Costa ha subrayado que la circularidad y la gestión de los residuos serán unos de los “retos clave” que deben afrontar la economía de Baleares.

“Se debe reducir la generación de residuos y mantener la senda conseguida en este sentido, que ha permitido rebajarla un 7,8% en apenas cinco años”, ha señalado Costa.

Consultado por si dispone de datos que indiquen la diferencia entre la generación de residuos de turistas y residentes, Costa ha alegado que “no disponía de cifras desagregadas” en ese sentido.

Sin embargo, la Conselleria sí ha ofrecido algunos datos que podrían ser indicativos al respecto, dado que la cantidad de residuos por habitante ponderados según el índice de presión humana de 2023 –es decir el número de personas que hay en Baleares en un momento dado– es de 521 kg por habitante al año pero esta cifra subiría a 680 kg si se calcula en función del padrón de 2022.

Por este motivo, el vicepresidente ha reivindicado que se debe impulsar el reciclaje y la reutilización, por solo el 23 % de los residuos en Baleares se reciclan, una cifra muy por debajo de la media española (39%) y la europea (49%).

Preguntado sobre cómo abordar esta cuestión, el conseller ha indicado que es una tarea de la sociedad en su conjunto dado que con estos niveles de reciclaje, en algunas islas y ha puesto el caso de Ibiza, puede haber “problemas” en la gestión de los residuos y a largo y medio plazo es “insostenible”.