La Conselleria de Medio Ambiente y Territorio subvenciona un total de 21 proyectos de economía circular a través de los fondos europeos, entre ellos, las obras de la planta de metanización del Consell de Mallorca, que este jueves ha visitado el conseller Miquel Mir, y que está dotada con 6,7 millones de euros procedentes de los fondos Next Generation.

Además de Mir, el director general de Residuos y Educación Ambiental, Sebastià Sansó, y la vicepresidenta y consellera insular de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Aurora Ribot, también han visitado la planta.

Según ha explicado el Govern en una nota de prensa, se trata de uno de los 21 proyectos seleccionados en la convocatoria para el apoyo a la implementación de la normativa de residuos y el fomento de la economía circular en el archipiélago, de la que se han adjudicado 15,4 millones de euros.

El departamento ha recordado que esta convocatoria se hizo siguiendo criterios territoriales para que cada isla tuviera una dotación justa de fondo.

En la planta de metanización se produce biogás a partir de la fermentación de la fracción orgánica procedente de la recogida selectiva a los municipios y productores específicos, mediante el cual se genera energía 100% renovable, y también material que posteriormente se convierte en compost.

Mir ha destacado la importancia de los proyectos impulsados, “clave en el cambio de modelo de gestión de residuos para avanzar en el cumplimiento de los objetivos de la Ley de residuos y seguir convirtiendo los residuos en recursos”.

Por islas, en Mallorca se han subvencionado 12 proyectos por valor de 11,8 millones de euros; cinco en Menorca con un presupuesto de 1,7 millones de euros, mientras que en Ibiza los tres proyectos reciben un total de 1,6 millones de euros.

En el caso de Formentera, el proyecto tendrá una subvención de 214.785 euros.

Los ejes de las actuaciones subvencionables son la implantación de nuevas recogidas separadas de bioresiduos y mejora de las existentes; la construcción de instalaciones específicas para el tratamiento de los bioresiduos recogidos separadamente; la construcción de nuevas instalaciones de preparación por la reutilización y reciclaje otros flujos de residuos recogidos separadamente; así como las inversiones relativas a instalaciones de recogida (como puntos verdes), triaje y clasificación de residuos y mejora de las plantas de tratamiento mecánico-biológico existentes.